Todo cambio de estrategia presupone el diseño de un camino a seguir. Estos son pasos que deben planificarse, ¿verdad? Después de todo, puede ser un punto de inflexión para el negocio, especialmente al momento de tomar la decisión de migrar a la nube. Y eso implica nuevas tecnologías, nuevos procesos y una nueva cultura.
La primera fase es la evaluación, cuando se evaluará todo el entorno de la empresa, los procesos, las aplicaciones críticas, las tecnologías existentes y luego se rastreará todo el diseño de migración a la nube. Pero es claro que la exploración eficiente y segura de este nuevo escenario requiere cuidados como la formación de equipos y la difusión de una nueva cultura operativa.
Esto se debe a que, a medida que las tecnologías de la nube toman el lugar de los centros de datos físicos, las configuraciones del sistema se vuelven más complejas. Y en este camino de evolución, de acuerdo con las expectativas comerciales, muchas empresas se están moviendo hacia una arquitectura aún más emocionante, la Multicloud, que incluye entornos híbridos y es uno de los modelos más adoptados por ellos.
De esta forma, amplían aún más el uso de la tecnología como servicio, en un modelo que les permite disfrutar de servicios de varios proveedores en la nube para alimentar sus aplicaciones. Así, al tener cargas de trabajo divididas en más de una nube, es posible aprovechar mejor el potencial de cada entorno, como, por ejemplo, soluciones de análisis en una nube y aplicaciones de cliente final en otra. El cielo es el límite.
No es casualidad que Multicloud gane espacio cada día porque, por lo general, no siempre un único proveedor es capaz de cubrir todas las necesidades del negocio. Por lo tanto, este enfoque puede ser una gran opción cuando el objetivo es reducir los riesgos de interrupciones u obtener aún más ventajas. Es una cuestión de estrategia. Pero debe estar preparado para tomar el control de un entorno multinube. ¿El primer paso hacia esto? Comprender cómo funciona.
En control de la arquitectura Multicloud
El éxito de cualquier migración es la preparación, por lo que la capacitación del equipo es fundamental, para lidiar no solo con las nuevas tecnologías, sino con la elaboración de nuevos procesos rutinarios y prestar atención a la creación de una cultura de nube y seguridad de datos, modernización de procesos y mucha innovación.
Sin embargo, el proceso de implementación de Multicloud es bastante complejo y requiere mucho conocimiento en la infraestructura de la nube. De ahí la importancia de contar con un proveedor de servicios experimentado. Dejar la operación Multicloud al partner es asegurar el foco en el negocio.
Otro punto no menos importante es centralizar la monitorización de nubes en una única estructura para obtener un mayor control y operar de forma simplificada, facilitando el día a día del equipo. El partner se encarga de la operación y, en la práctica, la operación no es más que mantener todo funcionando.
El partner que ha estado trabajando desde el comienzo de este viaje, con evaluación de peso, además de todas las evaluaciones, orientación y provisión de tecnologías, también ayuda a configurar las estructuras Cloud Center Office Excellence (CCoE). El objetivo es prepararse para la operación Multinube con pleno conocimiento de cómo funciona y cómo explorar estratégicamente esta arquitectura, con un único punto de gobierno.
¿Y después? Cuando todo está en pleno funcionamiento, bajo control, la estrategia puede dar un salto a otra dimensión: el seguimiento de la experiencia del usuario con los servicios.
Esto se debe a que la nube ayuda a traer mejoras a la operación, permitiendo que la empresa cree sus propios mecanismos de monitoreo, elevando su excelencia. De esta manera, alcanza el nivel de monitoreo de la capa de negocios, utilizando tecnologías que revelan la experiencia del usuario final en el uso del servicio. A partir de ahí, los ajustes se pueden hacer de forma rápida y asertiva: oro puro para el negocio.